Cómo elegir y usar correctamente una máscara LED facial

Cómo elegir y usar correctamente una máscara LED facial

Guía práctica con consejos de expertas para sacar el máximo partido a la tecnobelleza
Por Violeta Valdés · 17 de febrero de 2025

Las máscaras LED faciales se han convertido en uno de los dispositivos estrella para cuidar la piel desde casa. Sin embargo, la gran variedad de modelos y tecnologías puede resultar abrumadora. ¿Cuál es la adecuada para ti? ¿Qué factores hay que tener en cuenta antes de comprar una?

Con la ayuda de Miren García-Chazarra, cofundadora de Glo, y Sara Riballo, PR Manager de Foreo, hemos elaborado una guía completa para ayudarte a elegir bien y usarla correctamente.


1. Elige la máscara LED adecuada: la importancia de las longitudes de onda

Cada color de luz penetra a distinta profundidad y sirve para un objetivo específico. Estas son las claves según las expertas:

  • Clínicamente probadas: asegúrate de que las longitudes de onda han sido validadas por estudios.
  • Potencia suficiente: si la intensidad es baja, necesitarás sesiones demasiado largas para notar resultados.
  • Adecuadas a tu piel:
    • Luz roja + infrarrojo cercano → rejuvenecimiento.
    • Luz roja → tratamiento del acné.
    • Luz amarilla → cicatrices, dermatitis y rejuvenecimiento.
    • Luz verde → manchas y tono irregular.

“Cada tipo de luz penetra a diferentes profundidades, logrando un tratamiento más específico y eficaz”, explica García-Chazarra.


2. Material y diseño: mucho más que estética

Una buena máscara LED no solo debe verse bien: debe ajustarse perfectamente al rostro y estar hecha con materiales seguros.

  • Proximidad máxima a la piel: cuanto más cerca, más eficaz el tratamiento. GloMask, por ejemplo, está hecha de silicona líquida flexible de grado médico, ultrahigiénica y hipoalergénica.
  • Opaca por fuera y transparente por dentro: esto evita fugas de luz y mejora la penetración del LED.
  • Cobertura completa: busca modelos que lleguen a zonas críticas como entrecejo y contorno de ojos.
  • Comodidad: lo ideal es que sea inalámbrica y ligera para usar sin molestias.
  • Certificaciones: la más reconocida es la de la FDA y la CE, aunque también es clave que esté certificada como dispositivo médico.

3. Cómo usar bien una máscara LED facial

Cada dispositivo tiene sus propias instrucciones, pero hay principios universales que debes seguir:

  • Duración recomendada: la dosis óptima probada en estudios clínicos es de 30 mW/cm², alcanzando 18 julios/cm² tras 10 minutos.
  • Constancia: la clave del éxito es la regularidad. Usarla cada día o en días alternos mejora notablemente los resultados.
  • Efectos visibles: algunas personas notan cambios inmediatos (más luminosidad, piel relajada), pero los beneficios duraderos llegan con el uso continuado.

“Si no se usa la terapia de luz LED todos los días, los resultados pueden tardar más en aparecer. La constancia es clave”, afirma Riballo.


4. Contraindicaciones y precauciones

Aunque la terapia LED es segura y no emite rayos UV, conviene seguir ciertas recomendaciones:

  • No excedas el tiempo recomendado: pasar de los 10 minutos puede provocar bioinhibición, un fenómeno en el que la luz deja de ser beneficiosa.
  • Efecto prolongado: tras la sesión, las células siguen activas entre 24 y 48 horas, por lo que no hace falta usarla más de una vez al día.
  • Evita improvisar: sigue siempre los protocolos clínicamente probados para evitar irritaciones o falta de resultados.

Conclusión

Invertir en una buena máscara LED facial puede transformar tu rutina de belleza… siempre que sepas elegir el modelo adecuado y seas constante con el uso. Fíjate en la potencia, las longitudes de onda, los materiales y las certificaciones de seguridad. Y recuerda: no se trata de usarla más tiempo, sino de usarla mejor.

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